Alvin Kennard, un hombre de Alabama, Estados Unidos, consiguió recientemente la libertad provisional, luego de pasar 36 años en prisión. En 1983, cuando tenía solo 22 años, el sujeto fue condenado a cadena perpetua por robar 50 dólares en una panadería.
La condena fue impuesta a Kennard sin posibilidad de libertad condicional, pero ahora el hombre, actualmente de 58 años, será liberado después que un juez haya ordenado su salida vigilada del centro correccional de Donaldson en Bessemer.
La alta pena que se le impuso en ese tiempo se debe a que fue bajo la Ley de Delincuentes de Delitos Habituales del estado. Dado que era su cuarto delito, el juez lo sentenció a cadena perpetúa. No obstante, su abogada, Carla Crowder, explicó que con la ley actual el hombre hubiese sido condenado a un máximo de 20 años de prisión.
Con estos antecedentes, el juez David Carpenter, ordenó su liberación de prisión el miércoles y ahora será procesada por el Departamento de Correcciones de Alabama, consigna La Vanguardia.
Cuando le preguntaron sobre qué haría en el caso de ser liberado, Kennard respondió que quería trabajar como carpintero y vivir con su familia en Bessemer. «Quiero pedir perdón por lo que hice. Me equivoqué. Yo asumo la responsabilidad por lo que hice en mi pasado. Quiero la oportunidad de hacer bien las cosas», declaró ante el juez.
Previo al robo que le valió la cadena perpetua, Kennard fue acusado de tres delitos similares, uno de ellos de una cantidad significativa de bienes personales. Nunca hirió a nadie en sus atracos y siempre se declaró culpable de cada cargo.