Sin duda, uno de los sectores económicos más afectados por el coronavirus es el que incluye a bares y restaurantes. La mayoría de estos locales se vio obligado a cerrar sus puertas y solo algunos se han mantenido en el mercado a través de entregas a domicilio.
Manuel Gil, un empresario hotelero español, cree tener la solución para ayudar a acelerar la reapertura del sector. El madrileño de 49 años creó unas mamparas que quiere que los bares usen «para proteger la salud de las personas».
Se trata de un sistema para separar a los comensales en la mesa de un restaurante, por ejemplo. Pueden verse, hablar pero no tocarse y «si alguno estornuda, no pasaría nada», aseguró Gil al diario El Español.
Siendo dueño de un bar, en la localidad madrileña de Leganés, se quedó sin actividad por la cuarentena. Preocupado por la situación, Manuel comenzó a pensar qué podía hacer para aportar su granito de arena para ayudar al sector hotelero a remontar. «Como tengo mucho tiempo ahora en casa y como también soy decorador, se me ocurrió hacer una separación en la mesa de mi comedor con dos cartones y se me encendió la luz», explicó
«Y, claro, como se prevé que cuando el Gobierno deje reabrir los bares, lo tendrán que hacer con una serie de restricciones y medidas de separación. Entonces, pensé en crear los separadores para que las autoridades vean que nos estamos moviendo para continuar con el sector, pues considero que esto es reinventar la hostelería de futuro y se quedará implantado en muchos restaurantes», comentó Manuel.
El empresario ya registró la marca de mamparas de separación Llenatubar.com. A través de la página ofrecera varios tipos de separadores que variarán su eficacia en función del precio. La unidad de la mampara más cara, que estará compuesta por metracrilato y aluminio rondará los 500 dólares, mientras que la más barata estará disponible por 250 dólares y sólo llevará metracrilato.
